Monday, December 7, 2009

CREACION, EVOLUCION, COMPUTACION

CREACION, EVOLUCION, COMPUTACION
CREATION, EVOLUTION, COMPUTERS
CREACIONISMO, EVOLUCIONISMO, COMPUTACIONISMO
CREATION, EVOLUTION, COMPUTER
Siempre existen ejemplos, síntomas o fenómenos en el mundo que pueden ser interpretados según ciertas creencias, conjeturas o teorías, y viceversa.
Así por ejemplo, la existencia del hombre en la Tierra justificaría la creencia del creacionismo o la teoría de la creación divina, pero en cambio, la existencia de los mismos primates y orangutanes, desecharía esta creencia y justificaría la creencia del evolucionismo o la teoría de la evolución, pero en cambio también, la existencia del sistema visivo y del ojo humano, desecharían tanto una, como la otra teoría, y justificaría la creencia del computacionismo o la teoría de la computación.
La existencia del hombre en la Tierra y en el universo, sin más, es por si misma misteriosa y puede ser interpretada por los instintos y creencias mas básicas y simples de ser entendidas, como las divinas religiosas que solo necesitan fe (autoconvencimiento provocado), y por eso se entiende que, exista mucha gente sin conocimiento que defina la existencia del hombre, como un acto de creación divina.
Pero claro, si nos metemos un poco a conocer más de las cosas de la materia y de la vida, vemos en seguida que la existencia de monos y primates superiores, no encaja con la idea misma del creacionismo divino, ya que ponen en evidencia su utilidad.
Se supone que esos primates están ahí antes que la existencia del hombre para que le sirvan de línea evolutiva de existencia, y sobre todo, para testar físicamente las condiciones ambientales del sistema, desencadenando después, sin son buenas y propicias, todo el proceso del origen del hombre
¿Para que necesitaría esa divinidad creacionista a los monos, si puede crear al hombre directamente y a su entorno de forma perfecta? No tendrían sentido.
Pero claro, si nos metemos a saber más sobre la composición y funcionamiento de la vida y del hombre, vemos enseguida cosas que llaman demasiado la atención y que no pueden haber surgido directamente de una evolución casual y espontánea. Ni tampoco de una mutación, selección natural o lucha por la especie o por la vida.
Desechada la vía del creacionismo divino simple, y comprobando la inviabilidad del evolucionismo casual imposible, solo nos queda la teoría de la computación, o lo que es lo mismo, entender que el sistema visivo y el ojo son un diseño perfecto, tanto tecnológica como científicamente, que requiere de unos conocimientos de óptica, de radiación, de funcionamiento de la materia, de sensores bioquímicos y de procesos de dosificación de flujos energéticos, que al día de hoy, la humanidad entera (mas de 7.000 millones de personas inteligentes con su ciencia incluida), todavía no sabe, ni puede explicar.
Por poner un ejemplo, todavía creemos erróneamente, de la mano de esa ciencia física oficialista obsoleta e inoperante (que prefiere perder el tiempo buscando “la higgs” en el LHC del CERN que ya llaman la partícula de dios por lo divina que creen que es), que las imágenes se ven invertidas en la retina o que el color se ve en esa retina, porque existen tres tipos de conos (sensores bioquímicos), unos sensibles al azul, otros al rojo, y otros al verde, como si de una vulgar TV se tratara, cuando es imposible.
Y por tanto, la existencia del mismo ojo humano y la de los primates, desecha de una forma sencilla e irrefutable, las creencias del creacionismo divino y del evolucionismo casual, quedando una única vía de conocimiento con una cierta probabilidad de éxito, aunque cueste admitirlo ya que requiere de mucho conocimiento que aún no se tiene, ni tan siquiera por parte de esa ciencia física oficialista, y que no es otra, que la teoría de la computación.
Y así, podemos con ella justificar la existencia del hombre, de los primates y del ojo humano, sin contradicciones y de paso justificar todos los fenómenos correctos de una y otra creencia.
Y así por ejemplo, sabemos ya que, el universo es modularmente cíclico y en él aparecen la materia y la vida automáticamente en cada ciclo, basadas en partículas elementales (PEs) y fundamentales (PFs) de dos componentes, uno físico (masa, energía, tiempo, etc) y otro metafísico (lógica de funcionamiento), y también aparece el hombre, pero sin la necesidad de ningún dios incluido el judío, ni de una evolución casual y espontánea.
Y en esas PFs que vibran a una inmensa velocidad y frecuencia (1027), existe toda una información condensada en forma de software de diseño residente (SDR), incluida la del diseño perfecto de la materia y de la vida, y que según evolucionan computacionalmente, se va desarrollando finalmente, toda una expresión de conocimiento, de vida, de inteligencia y de belleza, al originarse las inmensas cantidades de animales y de especies que vemos.
Es posible también y por desgracia, que dado el grado de desconocimiento, de papanatismo, de fe provocada, y sobre todo, de ignorancia, mas grave en esos medios profesionales que se dedican a descubrir el conocimiento, como lo son todos esos que trabajan para las ciencias de la física, de la astrofísica y de la vida, se tarden décadas en asimilar este nuevo conocimiento que ayudaría a vivir mejor.
Entre otras cosas, porque este nuevo conocimiento surge de una Física Teórica Unificada, testada ya con éxito durante 13 años, y que predice también, las nuevas fuentes de energía RME casi inagotables del futuro de la humanidad.
FCO MORENO MECO – Ingeniero y Científico – mteasl@hotmail.com